
30 de septiembre de 1635 – El Cacique Coronilla y otros Compañeros originarios fueron ferozmente ejecutados
Nicasio Barrionuevo 30 de septiembre de 1635 – El Cacique Coronilla y otros Compañeros originarios fueron ferozmente ejecutados. Coronilla fue un cacique Diaguita que rindió su vida en aras de la libertad y con toda justicia puede considerárselo como un precursor de la independencia americana. Durante el Gran Alzamiento Calchaquí (1630-1635), el cacique Chelemín le confió la tarea de sublevar los pueblos de la provincia de La Rioja y en esa misión lo sorprendió Jerónimo Luis de Cabrera, nieto del fundador de Córdoba, tomándolo prisionero en Nonogasta. El levantamiento indígena fue consecuencia del esclavismo al eran sometidas las comunidades originarias por los españoles. Los invasores, ávidos de riqueza y glorias no vacilaron en cometer un verdadero etnocidio para lograrlo. El trabajo forzado y sin límite horario, los tormentos y aún la muerte fueron poco a poco extinguiendo los originarios. Con el propósito de escarmentar a los insurrectos, Cabrera condenó a Coronilla a morir descuartizado por cuatro caballos; pena nunca aplicada antes. La ejecución se cumplió en cercanías de Chilecito. Un siglo y medio después, Túpac Amaru recibió idéntica condena.
El poeta Héctor David Gatica en La Cantata Riojana reivindica la figura del Diaguita: «Entonces marca un alarido en La Rioja, ésta rebelión que le ha nacido a América. Cacique Coronilla prepara la insolencia de tus crenchas, ya cuatro potros te arrastran por el Valle de Antinaco, ya cuatro potros se dividen los puntos cardinales de tus miembros y componen con ellos, la Rosa Salvaje de los Vientos…».
CACIQUE COMPAÑERO CORONILLA, PRESENTE!!!